Criminales

Este libro alumbra de modo distinto el mundo del delito y el judicial. No es un catálogo de asesinatos y ni siquiera de delitos especialmente graves, aunque de ellos se ofrecen ejemplos contundentes. Ronzoni elige para explayar su talento literario casos raros o complejos, algunos extremadamente dramáticos, otros jocosos, innovadores en cuanto a las decisiones de la Justicia e incluso aporta elementos sustanciales de un proceso, escondidos durante décadas. En la narración de la casi muerte de un Maradona desbordado de cocaína en Punta del Este en 2000, aprovecha para realizar un fresco apabullante del universo de las frivolidades, de la plata dulce, de los amigos interesados, de los ídolos carcomidos impuestos como modelos de éxito. Nos cuenta episodios cercanos al sainete si uno logra distanciarse del sufrimiento de la víctima: una joven inescrupulosa torpe y empecinada en eliminar, una y otra… y otra vez, a la esposa de su amante (2008). Nos habla del secuestro de Rospide (2010) y del extraño entorno del Club Armonía con sus comensales disímiles y poderosos. Descubre, después de 60 años, el expediente escondido de la muerte de Dionisio Díaz que es utilizado para una impecable y rigurosa autopsia histórica de los doctores Guido Berro y Celso Silva. Con solvencia, respeto y capacidad de desbrozar lo superfluo, reconstruye el asesinato de la joven comunista Nibia Sabalsagaray en un ejemplo de periodismo riguroso. El texto, además de ilustrar la complejidad humana, ayuda a entender cómo funciona la Justicia en nuestro país, sus limitaciones y trabas legales, las presiones que sufre, los dilemas jurídicos y morales a los que se ve enfrentada, la firmeza y honradez de algunos magistrados. Un libro periodístico con un notable valor literario.