Page considera que su vida es perfecta: madre de dos hijos encantadores, casada con un hombre afectuoso, atractivo y de éxito profesional, lleva dieciséis años de matrimonio feliz. Sin embargo, una noche le comunican que su hija ha sufrido un terrible accidente.
El mundo de Page se derrumba como un castillo de naipes. Comprueba que su existencia no es tan idílica: su marido le engaña, su hijo se sume en la depresión, la vida de su hija pende de un hilo…