Narcos en el Uruguay

Uruguay, «el país más tranquilo y seguro de América del Sur», no está al margen de lo que ocurre con sus vecinos, donde el narcotráfico está presente y es parte de lo cotidiano. Países como este, que años atrás solo puntos de transbordo para la droga, se han convertido en proveedores o en consumidores o en ambas cosas.
Conforme a esto, la violencia desplegada por las organizaciones criminales en Uruguay se ha ido incrementando. Hoy es en el marco de una lucha interna por la disputa de zonas territoriales. Mañana puede ser enfrentando a la autoridad, pero por lo pronto ya aplican su propia justicia, la del sicariato, la del ajuste de cuentas. Pero todas las historias tienen un principio.
Y es precisamente este el que Antonio Ladra reconstruye con su investigación de cuatro casos: Lilo, Clavijo, Bocha y Operación Campanita, los cuales, además de resultar emblemáticos, permiten formarse una imagen nítida del desarrollo de esta actividad en el país, a la vez ofrece una mirada de cerca a la verdadera naturaleza de aquellos a los que, en ocasiones, se pretendió exhibir como benefactores y que disfrutaron de una suerte de culto a la personalidad.
Esta investigación periodística, aunque abarca solo una parte de un problema profundo, contribuye a entender como el tema del narcotráfico no se comprende reduciéndolo a las drogas: hay grupos del crimen organizado, traficantes, consumidores, corrupción, violencia y muerte.